Los años pasan, y con ello, todo nuestro alrededor... La casa donde vivimos nuestra niñez es hoy o será algún día fruto del paso del tiempo, así como nuestro cuerpo, pensamiento y vida ya no es la misma...
Antes con nada se era feliz, en cambio ahora, necesitamos o mejor dicho creemos necesitar un sinfín de cosas, materiales en su mayoría, que antes no necesitaban para ser felices... La vida a cambiado, la sociedad también, todo, pero a veces se nos olvida lo más importante...
... la familia, la que nos apoya y nos corrige, la que no debemos olvidar nunca, tanto a los presentes como a los que ya no están, porque con un simple recuerdo podemos pintar una sonrisa en nuestra cara.
Ellos han tenido una vida muy sacrificada que mucha gente no sabe valorar, y eso es un grandísimo error ya que todo lo que hoy día tenemos no estaría si no fuera por ellos.
Nuestros abuelos inmigrantes, esos que posiblemente todos tengamos, iban y dejaban todo por tal de llevar un jornal a su hogar, por darles de comer a sus hijos y que en un futuro no les faltara de nada.
Las labores, actividad cotidiana de la mujer de toda la vida que poco a poco le está ganando terreno el smartphone, las redes sociales, o la televisión...
Muchos dejan atrás este mundo sin ni si quiera saber lo que es "la playa", un concepto que hoy día tenemos casi aborrecido de tanto visitarla, pero no nos paramos a pensar que eso no es prioritario para ellos.
Saben valorar mejor que todos nosotros lo que es la vida, la felicidad y la familia y dejar las cosas materiales apartadas. Una simple sonrisa de un niño, el detalle de un familiar o una visita son las cosas que les hacen felices.
Para concluir, pensemos por un instante que es lo que de verdad importa en esta vida y qué queremos que se lleve la gente de nosotros, una foto para instagram o un recuerdo que perdure toda la vida en nuestro interior. :)
(Las imágenes están tomadas con la cámara Canon Eos 70d y el objetivo Sigma 18-300mm, y el retoque con el programa PhotoScape)